31 de octubre de 2011

Pensando en el Aire, para el Aire!!

Experimentando un dolor sin instrumentos, buscando un alimento para el corazón que fatigado se encuentra por los golpes, los manotazos y el frío del infierno brutal, en el que se ha convertido la vida.

No hay nada más grande que mi herida que persiste con los años, que crece y crece y me pregunto si acaso ya no soy más, que mi propia tristeza, no ha podido encontrarme. No sé quién soy, solo me escucho hablar, pero no soy quien habla es esta continua decepción que no se va.

Hay tantas cosas que quiero hacer, quisiera entre muchas cosas encontrarte, que no cambies más de rostro ni de brazos, quiero mirar desde lo alto de una colina las luces del océano de la ciudad y sentir que ya por fin soy superior a ellas que no me falta el aire.


Quiero tomar mi maleta y llegar hasta París, no porque pueda dejar mi corazón mi mente y mi dolor en esta tierra fatigada, sino porque quiero fatigarme con otras rosas, otros aires y en otro idioma.

Quiero abrir los ojos y que todo sea diferente, quiero entender la torpeza de mi sentir, tras uno y otro y otro paso que pequeño, me mata, me cuesta, me desvanece.

Me duele tanto verte partir, porque además te has ido ya tantas veces que cada día las lágrimas me cuestan más, cada vez que llegas y eres una cara diferente, unos ojos de color distinto, unas manos y un aliento diferente, pero sonríes y sé que eres tú. Y todo vuelve a ser como antes, me llena tu sentir y no me importa el color de tu cabello, porque son tus mismos besos y tus mismos abrazos y esperas a que mi corazón se ilusione y cada día pasa más rápido y ya conoces que no necesito de grandes hazañas para ilusionarme irremediablemente.

Pero no te quedas, te vas, siempre te vas y quedo como estaba antes.

La herida se hace más profunda y ahora siento que ni llorar tiene sentido, quiero hacerlo, pero no para convencerte que no te vayas, quiero llorar para olvidar que no eres tú, que no eras ese rostro, que no eras esas manos.

Quiero que alguien me explique porque traigo conmigo esta maldición, porque sigo esperándote, he querido olvidarme de ti y dedicarme a mil asuntos más, pero mis noches tristes me acuerdan que en algún lugar del mundo estas.

Por favor, no aparezcas nuevamente, si no vas a quedarte no llegues de nuevo, no te complazcas con hacerme sufrir , ya te has aparecido de la mano de alguien y ahora temo que por completo se haya endurecido mi corazón y que sin maldad, pero si con recelo, pánico y terror lastime tus mil rostros y tus mil brazos.No quiero que me hagas más daño, porque cada día el hoyo es más profundo.

Hay gente que dice que existe el fondo, pero no logro tocarlo y me da miedo llegar hasta allá.
Sin fuerzas, desde la soledad de una agitada vida.

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