20 de julio de 2013

Una nueva experiencia



Y bien, siempre hay primeros nuevos pasos en la vida, y pienso que en una muy buena proporción la vida es eso: una secuencia de partes y de pasos que se unen en un conglomerado imperfecto. Es un espacio sin fin en donde colocas cosas y situaciones milimétricas, es un punto en un universo, pero al mismo tiempo es como la primavera o el otoño, es todo cuanto tenemos y se puede contar como amor, o paz, o tranquilidad, incluso los momentos más tormentosos nos generan esa  idea de constructores de vida.


En total la vida aunque molesta cuando no lleva el antifaz es un regalo maravilloso, siendo apenas surtidores de penas y alegrías somos artistas en eso que nos encomendaron en vivir.


Esos pasos entonces nos llevan a pensar en la independencia como una opción, y es curioso pasar varios años convencidos que la meta es comprar y vender y tener y convencernos de nuestra propia autosuficiencia, pues bien siendo objetos milimétricos en el universo, yo con mi complejidad, ni por gusto o disgusto, sino como siguiendo algunas ordenes que me parecen lógicas termine viviendo esa incipiente idea de  independencia.